Ir al contenido

Kesai

Kesai (él/ella)

No conocer a mi padre era no conocer mi yo masculino, mi negritud, quién era yo como persona. Mi madre hizo todo lo que pudo para apoyarme a mí y a mis necesidades emocionales. De niño, me inscribió en terapia. Allí pude exteriorizar mis emociones. Se trataron todos mis problemas de rabia, tristeza, confusión y abandono. Mi terapeuta creó un lugar seguro para que yo hablara de mi padre y de mis sentimientos en torno a esa falta de conexión. También tengo un tío al que estuve muy unida durante mi infancia. Era mi padre sustituto y desempeñaba el papel masculino en mi vida. A través de él conocí el budismo. Me atrajeron sus enseñanzas sobre el despertar a tu verdadero yo y la autosuficiencia. Desde muy joven aprendí a sentirme cómodo en mi propia piel. Mi madre, que es blanca, quería que tuviera una educación negra y creciera "negra". Nunca me lo creí porque no era auténtico. Crecí con una madre blanca, un tío blanco y un hermano mayor blanco. Aunque nunca me consideré blanca, tampoco me consideré negra. Siempre me he visto como yo, Kesai. Nunca me ha gustado que la gente y la sociedad me dicten quién debo ser y cómo actuar en función del color de mi piel. He visto lo doloroso que puede ser intentar encajar en un molde para pertenecer.

Aún no hay comentarios, ¡pon tu voz aquí abajo!


Añadir un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbase a nuestra lista de correo